¿Sentir es vivir según UCDM?
La respuesta es tanto sí como no, dependiendo de donde esté depositada la fe del ser que percibe.
Si aceptamos lo que Jesús nos dice que somos, hijos de Dios, creadores como Él, y con Él en el Cielo, hemos de aceptar que lo que percibimos aquí, en la Tierra, lo creamos falsamente nosotros.
La lección 16: <<No tengo pensamientos neutros>>, es elocuente al respecto.
<<La idea de hoy es uno de los pasos iniciales en el proceso de desvanecer la creencia de que tus pensamientos no tienen ningún efecto. Todo lo que ves es el resultado de tus pensamientos. En esto no hay excepciones. Los pensamientos no son ni grandes ni pequeños, ni poderosos ni débiles. Son simplemente verdaderos o falsos. Aquellos que son verdaderos crean a su semejanza. Aquellos que son falsos fabrican a la suya.>>
En este párrafo la palabra pensamiento tiene el significado de idea o creencia, y el sentimiento inherente al mismo, o fe depositada en él, no el de creación, que es el otro significado con el que Jesús utiliza la palabra pensamiento, como cuando me dice que soy un Pensamiento de Dios, según utilice la palabra en referencia a la causa de un ser, la fuente de sus ideas, o al efecto de un ser, su creación, pues Su Hijo es Su Creación.
Cuando esos pensamientos son verdaderos crean la verdad, esto es crean lo semejante a lo que son, la verdad interior; mas cuando son falsos fabrican a la suya, esto es, fabrican, o crean falsamente o proyectan (tres expresiones sinónimas) un mundo falso, irreal, que el ser que crea falsamente ve separado de él, fuera de él, de ahí las expresiones sinónimas proyección y fabricación de imágenes, pues una imagen, por principio, está separada del que la percibe.
Jesús nos dice en su curso que no nos falta fe, sino que la depositamos mal, porque lo hacemos en las ideas o creencias que constituyen nuestra falsedad interior, razón de que fabriquemos un mundo falso, y nos dice respecto a la fe lo que justifica la afirmación del cuadro que estoy comentando:
<<Y la fe sólo se puede recompensar en función de la creencia en la que se depositó. La fe le infunde poder a la creencia, y dónde se deposita dicha fe es lo que determina la recompensa, pues la fe siempre se deposita en lo que se valora, y lo que valoras se te devuelve. >> (T 13.IX.2: 4)
En el curso de Jesús dar valor significa dar realidad, y si comprendemos que nada que sea irreal nos inspira sentimiento alguno, comprendemos que la fe de la que habla Jesús es sentimiento.
Esto quiere decir que una idea o creencia se expresa en nuestra percepción, nuestra creación, si es inherente a ella un sentimiento.
En este sentido toda creencia con poder para manifestarse está anclada en el corazón, tal como indica la imagen que comparto.
Como la vida es creación (UCDM T 11.Introducción.1), el sentimiento es inseparable de la vida, pues sin él nada se crea aquí, en el nivel de existencia de la percepción – el nivel del sueño o de la conciencia – en el que la creación es una proyección de las ideas o creencias, de modo que sentir es vivir, tal como dice el cuadro.
Pero se trata de una media verdad, porque el falso ser no vive, aparenta vivir, mas puesto que su vida acaba en la muerte, su vida es falsa, Este es el sentido de las siguientes palabras de Jesús en su curso, referidas al cuerpo: <<No tiene vida, pero tampoco está muerto >> (27.I.9:7)
El falso ser, el ego – cuerpo, no está muerto porque crea, más al crear falsamente no tiene vida, sino una falsa vida que acaba en la muerte, razón de que Jesús nos diga a los que vemos el mundo que ven los ciegos, que estamos soñando un sueño de muerte.
